Así que, estimando que ya se han vendido 6 millones de iPhone 4, las cuentas dicen eso. Otra opción algo menos agresiva económicamente sería arreglar los teléfonos afectados en las Apple Store. Pero para países como España en los que no hay Apple Store o no abundan, no sería una decisión factible. Reparar el teléfono costaría $75 (aunque no sabemos a qué tipo de reparación se refieren). Sin embargo, la solución más efectiva sería regalar un Bumper a todos los clientes, que aunque a nosotros nos cuesta $29, a Apple no le cuesta más de $1.
Personalemente pienso que Apple debería de tomar la primera elección y cambiar el iPhone a todos los usuarios afectados. Teniendo en cuenta la ingente cantidad de ingresos y ganancias que genera la empresa, sin haber generado un sólo dólar de pérdidas en muchos años, no creo que sea demasiado crítico para ellos desembolsar $1,5 billones para contentar a sus clientes y lavar su imagen.
Veremos a ver qué decide finalmente Apple, pues ni hemos visto actualización de software ni ningún comunicado de la compañía. Simplemente hacen oídos sordos. Aunque viendo el caso del Time Capsule del otro día, fue en 2008 cuando los usuarios reportaron los primeros problemas. Hoy, en 2010 deciden cambiar todos los Time Capsule defectuosos. Esperemos que los usuarios del iPhone 4 defectuoso no tengan que esperar a 2012 para que Apple decida cambiárselo.